El restaurante

- Si no estuvieses tan pálido y no te temblasen las manos cabría la posibilidad de que creyera en tus palabras sobre la sala y los educadores-contestó, riendo levemente.

- Como que no importa, técnicamente solo importa la del amo, es decir, yo; así que no te pongas así que será para nada. Sobre tu insulto...lo dejaré pasar porque no estáss en pleno control mental-contestó, viendo como venía el camarero con la comida- muchas gracias-le dijo al chico, con una sonrisa que hizo que el otro tartamudeara y se fuese sonrojado.

-Grrr...- ¿era tan trasparente?

-¡Si que importa!¡Ya que te hare la vida imposible!¡Y estoy perfectamente mentalmente!- miro al camarero muy cabreado mientras se iba- ¡y que dejes de ligar!-

- No gruñas, es de ,mala educacion en un lugar como este-le regaño, mirando atentamente como el camarero se iba.

- Si a pegar voces te refieres en estar perfectamente bien realmente entonces estás estupendo-comentó, sonriendo de lado ante lo ultimo que dijo- ¿por que?tal vez a él si que no le importe formar una "familia" conmigo y tu...podrias ser nuestra chacha, ¿te parece eso mejor a que la formemos tu y yo?

Echo chispas por la mirada, sobretodo porque mientras le regañaba ni siquiera le estaba mirando.

-¡Y deja de enredar las cosas, no estoy bien, nada bien, contigo!- e iba a replicar lo ultimo diciendo que le daba igual lo que hiciera cuando una extraña opresion en el pecho lo acallo, y tras abrir y cerrar varias veces la boca, dijo:

-Me da pena el camarero, si acepta se metera en la boca del lobo...- musito apartando la mirada. -Y aunque me caiga mal, prefiero evitarle ese mal trago...-

Miro su plato, intentando no mostrar como le brillaban los ojos ante tal lujo de comida.

- Pues por eso, de chacha estarás mejor, y no te preocupes por él, lo cuidaré bastante bien y le daré todo lo que quiero-contestó, guiñándole un ojo cuando se dio la viuelta para atender a otros clientes, haciendo que se tropezara con sus propios pies, aunque por fortunsw no se cayó ni nada- te gusta la comida, ¿eh?-cuestionó, prepotente mientras con una elegancia que seguramente el otro ni imaginaba que pudiese tener cogio los cubiertos y comenzo a cortar la jugosa carne.

Se levanto y agarrandolo del rostro hizo que lo mirara a el.

-¡Que lo dejes en paz! No se merece, seguramente, un destino tan rastrero como tu le ofreces- siseo, irritado, muy irritado.

Observo como cogia los cubiertos, con su cara aun entre sus manos. -¿Se come con cubiertos?- preunto dudoso, algo mas calmado.

- Ey, no te enfades ytanto, tu mismo dijiste que no querias tener nada que ver conmigo en ese ambito, asi que no deberia importarte a quien me quisiera ligar o lo que a este le pasase-contesto, soltandose de su agarre para despuesw diroigir su mirtada de nuevo al camarero, aunque esta vez más a su trasero que a cualquier otra parte.

- ¿no me digas qur pensabas que la carne se comía con las manos?-cuestiono, sin mirarlo puies estaba más entretenido recreandose e el cuerpo del otro.

Harto de que solo prestara atencion al camarero con una enfado corrosivo en el que no reconocia ni como propio cogio la copa de vino de Ayame y por "accidente" se la tiro por encima.

-¡Uy! Se me resbalo- dijo con aparente inocencia.

Miró con verdadera furia al neko, notando como rapidamente el camarero dejaba sus obligaciones para venir hacia él- tú y yo arreglaremos tu castigo en casa-le siseó a su pet, cambiando su cara a una más seductora cuando llego el chico y le propuso que pasase a la parte trasera del restaurante a coger otra camisa de las blancas que llevaban con el uniforme, ya que practicamente el pantaloin nio se habia manchado- claro, pero...¿por que no me acompañas?asi no me perdere-le propuso, notandose claramente que queria más que su simple guia desapareciendo asi de allí con el camarero aunque antes le echo una mirada al neko que parecia decirle "te muieves y hagoi que te de un calambrazo que te deje en coma cuatro años"

Temblo un poco ante lo de su amenaza, pero le siguio con la mirada, echo una furia al ver como se iba con ese camarero y lo dejaba alli a el...

-Bueno...sera mejor que coma algo...es capaz de dejarme sin comida un mes- suspiro, pero nada arrepentido por lo que habia hecho.

Usando torpemente los cubiertos empezo a comer, aparentando tranquilidad...y tal era su hambre que se lo comio enseguida.

Volvió despues de un tiempo, con carqa de satisfaccion mientras se abrochaba la camisa y con la optra mano peinaba sus cabellos que estaban desordenados, al cabo de poco iempo lo hizo tambien el camarero que tenia el traje un tanto arrugado- tenias hambre-murmuro, al ver que se habia comido el solomillo entero, por lo que se sento él empezando a comerse tranquilamente el suyo.

-Y tu tambien- comento, cruzandose de brazos disgustado, viendo al camarero fulminante y con odio. -¿Quieres mas vino?- añadio con una inocente sonrisa.

- Bueno, puwede que tuviese bastante hambre, pero no precisamente de solomillo, sino de alguien aun más apetitoso-comentó, mirando de reojo al camarero- no lo mires así, va a pensar que lo odias sin razón-comentó, "inocentemente"-¿quieres que te lleve a la sala de torturas?

-...¿es divertido estar con alguien sin violarle?- entrecerro los ojos, con "sana" curiosidad. -Pobrecillo, creo que puede sobrevivir a mi odio...tu no- siseo.

Se tenso ante lo ultimo:

-SE que como ni opinion como neko no cuenta mucho, pero desde mi humilde opinion no me apetece ver esa sala- comento en un tono casual...

- Para mí más o menos es lo mismo, ya que lo tuyo no fue una violacion porque en estas se grtita de dolor y tu gemias de placer como lo haqcia el. Solo que el es muycho más cooperativo y hemos podido disfrutar de los preliminares más libremente- contestó- venga, ¿por qué estás enfadado?deberías estar feliz de que pudiese desfogarme en otros.

- Pues entonces deja tus amenazas para despues deco,mer, que no creas me he olvidado de tu castigo pendiente-contestó, comiendo con elegancia y tranquilidad.

-¡Lo hiciste sin mi consentimiento!- siseo cabreado.

Le solto como una patada en el estomago lo del camarero.

-Estoy que exploto de felicidad- rechino los dientes. -Creo que definitivamente ese camarero no va a sobrevivir a mi odio- musito, afilando sus uñas.

-... yo ya he terminao de comer asique puedo continuar con las amenazas, ¿y de que castigo se trata esta vez?- se mofo.

- Pero lo disfrutaste enormemente-contestó, comiéndose el último trozo del solomillo que no estaba bañado en vino.

- Es que no entiendo tú extyraño comportamiento, ¿ a ti que te importa con quien me acueste si ya me has dejado claro que conmigo no quieres nada?dewberías estar feliz de que pronto solo serás chacha.

- Ya que veo te molesta tantotrandrás que ver amarrado como esta noche ese mismio camarero y yo nos lo mopntamos en la cama de mi casa.

-...- solto un bufido por lo bajo, porque no fue capaz de mentirle: solo de recordar la escenita de ponia rojo como un tomate.

-¡No quiero a una chacha y no quiero ver a ese en la casa y punto!- se altero con una gran angustia palpitando en su pecho.

-Me niego a tal espectaculo, ademas eso no es un castigo para mi, sino para el pobre camarero: estar contigo es una tortura- se mofo.

- Pues por si no lo pensaste es mio casa, asi que en ella puede entrar quie a mi me de la gana, sin tu permiso ni opinion y punto-contesto, con una sonrisa prepotente para luego acariciar con una mano en cabello entre las orejitas del neko- fijate que tal tortura habra sido que hasta me a pedido mi numero de telefono, para quedar otra vez.

Solto un bufido tanto por su primera contestacion como por su caricia.

Agito la cabeza, ligeramente ruborizado, para que dejara de revolverle el pelo y le agarro de la mano, para que no lo volviera a hacer.

-Ni se te ocurra volver a llamarle- ordeno, irritado... MUY irritado.

- Bueeeno, si mi gatito celoso me lo pide creo que tendré que hacer caso y no lla,marle para quedar con él otra vez en casa-comentó, reseñando las do últimas palabras, pues le encantaba verlo asi.

-¿¿C-CELOSO??¿Yo?- exclamo, retrocediendo alterado, soltandole la mano, como si le quemase. -¡No me hagas reir!¡Yo no estoy celoso!.......¡y no soy "tu gatito"!- añadio lo ultimo al acordarse de nuevo en sus palabras.

Se cruzo de brazos, apartando la mirada para ocultar su sonrojo:

-Si ya has terminado vamonos antes de que me den ganas de arañar a ese camarero o de tirarte de nuevo el vino, o ambas cosas- musito. -A ese individuo no quiero volver a verle en casa- gruño por ultimo.

- Claro que estás celoso, y estás celoso de ese pobre camarero que tiene tan buen culo-añadió, sonriendo encantado- pòr cierto, no grites que se te han quedado mirando gatito-añladió, saludando con una mano para darle a entender a la gente que dejase de mirar- y eres lo que a mi me de la gana, que para eso te he pagado.

- Muy bien, nos iremos a casa a disfrutar de la cionvivencia, y aceptaré lo de que no le veas en casa, aunque tenga que pagar un hotel.

-Lo del culo podrias habertelo ahorrado- le recrimino disgustado. -¡Y no estoy celoso!- exclamo en un tono mas bajo para no llamar la atencion... yabastante atencion llamaba con ese estupido vestido. -¿Y me has pagado?¿Cuando?- se echo a reir. -Habras pagado a alguien que no soy yo y que no me conoce en absoluto, y aunque me pagaras no me portaria mejor contigo....¿quieres mas vino?- añadio malicioso.

-Prohibido verle en cualquier lugar- matizo echando chispas.

- Podría, pero ya que era algo bastante evidente no vi la nercesidad-aceptó, sin desaparecer de su rostro su sonrisa- he pagado tu precio como pet gatito, aunque e de decirte que para lo estrechito y calido que eras tu precio es bastante bajo, supongo que es port tu agresividad y porque tiendes a estar más monoi calladito, cosa que no haces-contestó, alzando una ceja ante lo del vino-si me dejas beberlo de tu boca encantado.

- ¿y eso no es estar celoso y ser posesivo? porque ai yo no te importara en lo más mínimo a quien me pasara por la piedra te seria indiferente.